San Pascualito Rey se despide de los escenarios: una última noche para celebrar 25 años de oscuridad y melancolía

Foto por Ricardo Gutiérrez

Tras 25 años de trayectoria, San Pascualito Rey anunció su concierto de despedida que se llevará a cabo el 7 de noviembre en el Auditorio BB, un cierre simbólico a una carrera marcada por la introspección, la intensidad emocional y la autenticidad artística que los convirtió en una de las bandas más influyentes del rock mexicano.

Durante la conferencia de prensa, la agrupación encabezada por Pascual Reyes, Alex Otaola, Juan Moreno y Omar D'León compartió los motivos detrás de esta pausa indefinida. Con tono honesto y nostálgico, Reyes expresó:

“Ha llegado el momento de abrazar un descanso. No es un adiós definitivo, pero sí un punto de inflexión. Cada uno de nosotros seguirá en la música, pero necesitábamos cerrar este ciclo con el público que nos ha acompañado desde el inicio.”

El vocalista también reconoció que la decisión no fue sencilla y que, aunque existe cierta frustración y descontento por el contexto actual de la industria musical, el grupo prefiere despedirse en lo más alto.

“Queremos hacerlo con dignidad. En tiempos donde muchas cosas se hacen sin alma, nosotros queremos honrar lo que fuimos y lo que somos, con una última presentación que concentre todo lo que representa San Pascualito Rey.”

El concierto promete ser un repaso por su legado musical, con temas que marcaron a toda una generación como “Ya No Sé”, “Nos Tragamos”, “Si Te Vas” y “Suplico”. Además, confirmaron que habrá invitados especiales, amigos y colegas de la banda que se sumarán a esta velada irrepetible.

Entre los momentos más emotivos de la conferencia, los integrantes recordaron la creación de su disco “Dark Guapachoso”, lanzado en 2024, como una metáfora perfecta de su identidad sonora: una fusión entre la oscuridad, la nostalgia y la fuerza del folclor mexicano. “Ese álbum encapsula todo lo que somos: melancólicos, intensos y profundamente humanos”, comentó Alex Otaola.

San Pascualito Rey, que desde sus inicios en el año 2000 se posicionó como un referente del “dark guapachoso” —una mezcla única de rock alternativo, bolero, trip-hop y tintes tradicionales—, cierra su ciclo dejando un profundo legado en la música mexicana.

El 7 de noviembre en el Auditorio BB, el público será testigo de una última noche de catarsis colectiva, donde la tristeza y la gratitud se entrelazarán con cada acorde.

“Más que una despedida, será un abrazo. A nuestra historia, a nuestras canciones, y sobre todo, a quienes siempre creyeron en nosotros”, concluyó Pascual Reyes.